miércoles, junio 02, 2010

Las violaciones de Monte Cassino

Marocchinate es una palabra italiana despectiva que significa "mujer del marroquí", y se conoce con ese término a las mujeres que fueron víctimas de una masiva violación en la Segunda Guerra Mundial por parte de las tropas francesas marroquíes. Este crimen de guerra se cometió luego de la Batalla de Monte Cassino, en las comarcas de Ciociara, Ausonia y Hesperia, al sur de Roma.

Para 1944 el Tercer Reich de Hitler estaba casi derrotado y apenas le quedaban unos pocos bastiones fuera de Alemania, uno de ellos era Roma. Para liberar a Roma de los alemanes, los aliados debían tomar una colina rocosa llamada Monte Cassino, en cuyo monte existe una abadía que en aquella época se había convertido en cuartel general de los nazis.

Monte Cassino en ruinas en 1944

El Monasterio en la actualidad

En la Batalla de Monte Cassino aparte de los soldados norteamericanos, participaron activamente los aliados, entre ellos los "Goumiers", que eran soldados marroquíes al servicio del ejército francés, ya que Marruecos fue su protectorado hasta mediados del siglo pasado.

Tropa de soldados marroquíes o "Goumiers"

Por fin los aliados pudieron tomar Monte Cassino el 18 de mayo de 1944 después de una de las más cruentas batallas registradas en territorio italiano. Ese mismo día por la noche después de haber cesado los combates, el general francés a cargo de los goumiers, Alphonse Juin, en recompensa por la victoria, les dio dos días libres a sus mercenarios, en los cuales éstos asaltaron, violaron y mataron a las mujeres italianas de las colinas circundantes. No repararon en la edad, fueron ultrajadas mujeres que iban desde los ocho hasta los 80 años de edad, y los pocos hombres o parientes -si es que lo había - fueron asesinados cuando quisieron defender a sus mujeres.

Entre las costumbres de los pueblos afro-asiáticos como los marroquíes, la derrota del enemigo debe estar acompañada de la humillación, saqueo y violaciones. Esta es una de las vagas excusas que los historiadores aliados han querido dar a lo que sucedió en Monte Cassino, hechos que por cierto fueron quedando en el olvido, principalmente por vergüenza propia o porque aquella era una zona marginal. Son historias de mujeres contadas por generaciones de madres a hijas.
Las pocas mujeres que lograron huir fueron rescatadas por las patrullas estadounidenses, que las protegieron y las trasladaron a lugares seguros lejos de los goumiers.
El ejército francés no quiso intervenir diciendo que era imposible poner orden a los mercenarios marroquíes.

A tal punto llegaba su crueldad, que los alemanes que fueron capturados por los marroquíes fueron vendidos a los americanos, muchos de ellos cortados las narices y las orejas, que se las llevaban como trofeos de guerra para exhibirlos en sus tribus primitivas.
Un testigo de la época, habitante de Cociara, los describe así:

"Las tropas coloniales francesas eran como grupos de mendigos, como bandidos saqueadores, no parecían soldados. Realmente parecían vagabundos"

Y es que en verdad, estos soldados marroquíes ni siquiera sabían por qué los habían llevado a pelear. Sólo sabían que había combates entre europeos y que ahí no tenían nada que hacer, salvo ser carne de cañón, como lo fueron históricamente desde la época de Napoleón III.

Los temidos Goumiers

Investigaciones posteriores establecieron que el número de mujeres violadas en esos dos días superó los siete mil.
Aunque el estado francés fue reticente y no quiso reconocer la magnitud de las posteriores demandas, abrió algunos expedientes judiciales emitiendo condenas a pena de muerte y trabajos forzados a 160 soldados, la mayoría de los cuales no se cumplieron. Más bien se sabe de 15 marroquíes que fueron sorprendidos en el acto y fueron fusilados ese mismo momento.
De todas estas violaciones casi no nacieron hijos, porque los soldados marroquíes tenían graves enfermedades venéreas que causaron la interrupción del embarazo y abortos espontáneos en la mayoría de los casos. Las pocas madres que tuvieron hijos, en su mayoría emigraron a ciudades más grandes donde no pasarían vergüenza.

"Two Women", película sobre el tema protagonizada por Sofía Loren

En 1957, el escritor italiano Alberto Moravia escribió la novela La Ciociara, sobre las violaciones en masa en esta ciudad. En 1960 se llevó al cine bajo el título "Two Women", con Sofía Loren como protagonista, papel que le reportaría el Oscar a mejor actriz. Esta fue la primera vez que concedían el Oscar a un papel en habla no inglesa.

Fuentes e imágenes:
Elgrancapitan, Laestanteria, Italia-rsi, Italy.indymedia

8 comentarios:

anza dijo...

hahah eso sii que no yo pido venganza para esas mujeres , que les corten la parte de piel que les sobra a esos mendigos

anizta (indignada)....:o(

Gabiprog dijo...

En las guerras se conjuran pequeñas historias y grandes calamidades.

TORO SALVAJE dijo...

En España las tropas marroquíes al servicio de Franco durante la guerra civil también cometieron infinidad de barbaridades.

En fin, no quiero comentar más porque se me enciende la sangre.

Saludos.

Belén dijo...

Una animalada, me parece, vamos...

Besicos

GABU dijo...

Las guerras llevan a los hombres a los excesos màs aberrantes y asì toda la humanidad es humillada!!

P.D.:He visto esa pelìcula pero no sabìa a fondo la historia,gracias al pulso de tus palabras todo se hace mucho màs didàctico... :)

MI BESITOS CABALLERO ANDANTE ;-)

Cecy dijo...

Las peores atrocidades mi amigo.
Eso es lo que hace y sabe la guerra de los hombres.


Un besote.

esteban lob dijo...

Cuando nos referimos a la crueldad extrema de otros tiempos, Edad Media por ejemplo, nos olvidamos de estas barbaridades acontecidas "ayer nomás" en la historia del mundo, avaladas por aquellos que permitieron días libres a criminales en potencia como aquellos. Esos comandantes franceses, fueron indirectamente los mayores cómplices de aquella masacre.

Un abrazo amigo Carlos.

Amorexia. dijo...

esa basura es "humanidad"

deshora.

 
Ir Arriba